martes, 25 de febrero de 2014

La mas antigua conocida

Descubren la estrella más antigua del Universo


La estrella fue descubierta a través del telescopio SkyMapper del Observatorio Sinding Spring. ESPECIAL

Se formó poco después del Big Bang y se encuentra en la Vía Láctea a unos seis mil años luz de la Tierra
SÍDNEY, AUSTRALIA (10/FEB/2014).- Científicos australianos descubrieron una estrella que se formó poco después del Big Bang hace unos 13.600 millones de años y que ha sido considerada como la más antigua del Universo conocida hasta la fecha, informó hoy la prensa local.

La estrella denominada "SMSS J031300.36-670839.3", que se encuentra en la Vía Láctea  a unos 6.000 años luz de la Tierra, permitirá estudiar por primera vez la composición química de los primeros cuerpos celestes y abre las puertas para indagar sobre los orígenes del Universo.

El jefe del equipo científico que descubrió esta estrella, Stefan Keller, de la Universidad Nacional Australiana, indicó que para determinar la edad las estrellas se toma en cuenta la cantidad de hierro presente en su espectro de luz.

El astrónomo, que comparó la probabilidad del hallazgo a "una en sesenta millones", señaló que la mayor cantidad de este mineral se corresponde con una mayor juventud.
"En el caso de la estrella que hemos anunciado, la cantidad de hierro era por lo menos 60 veces menor que en cualquier otra estrella", dijo Keller en declaraciones a la agencia local AAP.
 

Estraña pareja

Descubren una singular 'pareja cósmica'

viernes, 21 de febrero de 2014

Agujeros negros

Científicos: "Es posible que vivamos dentro de un agujero negro"


© NASA.gov
En contra de lo que explica la ciencia tradicional, algunos científicos están empezando a considerar seriamente la posibilidad de que todo el universo pueda estar dentro de un agujero negro.

La posible explicación 


La idea defendida por Nikodem Poplawski, investigador de la Universidad de New Haven, Connecticut (EE.UU.), es que la 'semilla' de nuestro universo fue forjada en un "horno definitivo", probablemente el ambiente más extremo en toda la naturaleza: el interior de un agujero negro.

A partir de un detallado análisis del movimiento de las partículas que entran en un agujero negro, Poplawski llegó a la conclusión de que, en realidad, existe todo un universo dentro de cada agujero negro. "Pudiera ser que los grandes agujeros negros que hay en el centro de la Vía Láctea y de otras galaxias sean, en realidad, puentes hacia otros universos", explicó el científico. 

Según las teorías de Einstein, en el interior de cada agujero negro existe una "singularidad", una región de espacio en la que la densidad de la materia tiende al infinito. La enorme fuerza de gravedad de ese 'condensado hiperdenso de materia' es tal, que ni siquiera la luz puede escapar de él. Por eso, para nosotros esos objetos son "negros", porque no emiten luz y no podemos verlos, ni obtener, en principio, ninguna información de qué hay en su interior.

Pero, ¿cómo podemos saber si efectivamente estamos o no viviendo dentro de un agujero negro? Si Poplawski tuviera razón, ninguno de nosotros estaría viviendo dentro de lo que consideramos "nuestro" universo, sino en el interior de un agujero negro que estaría, a su vez, en "otro universo" diferente.

 



¿Es plano el Universo?

Últimas noticias sobre el Universo
NASA 

 

¿Esférico, curvo o plano?

¿Cuál es exactamente la geometría del universo? ¿Vivimos dentro de una especie de esfera de múltiples dimensiones o se trata más bien de un tejido espaciotemporal que se curva suavemente y sin llegar nunca a cerrarse sobre sí mismo? ¿O puede que incluso no se curve en absoluto y que en realidad habitemos en un universo plano? La cuestión, uno de los mayores interrogantes de la Cosmología, tiene para nosotros implicaciones muy concretas y que van mucho más allá de ser simples cuestiones teóricas. De hecho, la geometría del universo influye de forma decisiva en los objetos que observamos.
En un espacio curvo o esférico, la luz que nos llega de galaxias o estrellas lejanas se deforma durante su largo viaje, de manera que la imagen que vemos no se corresponde con la realidad, sino que está distorsionada. Sería, en cierta medida, igual que mirarnos sobre la superficie de una bola metálica y ver nuestro rostro completamente deformado. En un espacio plano, sin embargo, esa distorsión no existiría y nos permitiría ver los objetos celestes tal y como son.
Por eso, Marinoni y Buzzi decidieron buscar pruebas de esas distorsiones observando 500 parejas de galaxias distantes en órbita la una alrededor de la otra. Usando las magnitudes de las distorsiones observadas, Marinoni y Buzzi fueron trazando la forma que tiene el tejido espacio temporal. Una forma que, según han podido determinar, refuerza la posibilidad de que vivamos en un universo plano.

miércoles, 19 de febrero de 2014

Antes del Big Bang

Un prestigioso físico asegura haber detectado otro universo antes del Big Bang

Roger Penrose, de la Universidad de Oxford, ha descubierto unos extraños «círculos concéntricos» que pueden ser «atisbos» de un cosmos primitivo

Según la teoría clásica, el Universo en que vivimos comenzó hace 13.700 millones de años con el Big Bang, una gran explosión de la que, además de la propia materia, surgieron también las leyes físicas que rigen su existencia, incluidos el espacio y el tiempo. Ahora, Roger Penrose, de la Universidad de Oxford y uno de los físicos más brillantes de la actualidad, cree haber detectado "atisbos" de la existencia de otro universo. Uno que existía antes que el Big Bang. Lo cual pone, literalmente, patas arriba las teorías cosmológicas actuales.
 
 
Un prestigioso físico asegura haber detectado otro universo antes del Big Bang
WMAP 
El físico ha encontrado unos extraños círculos en el fondo cósmico de microondas
 
En un artículo recién publicado en ArXiv.org, Penrose explica que ha llegado a esa extraordinaria conclusión tras analizar, en los datos del satélite WMAP, ciertos patrones circulares que aparecen en el fondo de microondas cósmico y que sugieren, ni más ni menos, que el espacio y el tiempo no empezaron a existir en el Big Bang, sino que nuestro universo existe en un ciclo continuo de "rebotes" que él llama "eones". Según Penrose, lo que actualmente percibimos como nuestro universo, no es más que uno de esos eones. Hubo otros antes del Big Bang y habrá otros después.
Unas ideas que se oponen frontalmente al modelo cosmológico más extendido en la actualidad: el de universo inflacionario. Según dicho modelo, el universo empezó en un punto de densidad infinita (el Big Bang) hace aproximadamente 13.700 millones de años, se expandió de forma extremadamente rápida durante una fracción de segundo, y ha continuado expandiéndose mucho más lentamente desde entonces, un tiempo durante el cual han ido surgiendo galaxias, estrellas, planetas y, finalmente, los seres humanos.
 

El tiempo antes del Big Bang

Penrose, sin embargo, está convencido de que el modelo inflacionario no cuadra con el bajísimo estado de entropía que hizo posible el nacimiento del universo tal y como lo conocemos. Y tampoco cree que el espacio y el tiempo empezaran a existir en el momento del Big Bang, sino que el Big Bang fue, de hecho, sólo uno entre una serie de muchos acontecimientos similares, con cada uno marcando el inicio de un nuevo “eón” en la historia del universo.
Las teorías de Penrose implican que, en un futuro lejano, el universo volverá, de alguna manera, a tener las condiciones que hicieron posible el Big Bang. Según el físico, en esos momentos la geometría del universo será suave y lineal, muy diferente a como es ahora, con abundantes picos y discontinuidades. Esta futura continuidad de forma, afirma, permitirá una transición desde el final del actual eón, con un universo muy expandido e infinitamente grande, al inicio del siguiente, cuando de nuevo se hará infinitamente pequeño para estallar formando el siguiente Big Bang.
 

Pruebas en el fondo cósmico

El físico asegura que ha encontrado pruebas que sostienen lo que dice. Y que esas pruebas están en el fondo cósmico de microondas, los ecos lejanos del propio Big Bang, una especie de rescoldo de aquella gran explosión que es detectable, hoy, en cualquier punto del universo.
Analizando, junto a su colega armenio Vahe Gurzadyan, siete años de datos del satélite WMAP, que está diseñado precisamente para medir el fondo de microondas, Penrose ha detectado con claridad una serie de "círculos concéntricos", regiones en el cielo de microondas en los que el rango de temperatura de la radiación es notablemente menor que en otros sitios.
Son precisamente esos círculos los que nos permiten "ver" a través del Big Bang, vislumbrando el eón que que existió anteriormente. Los círculos, dicen Penrose y Gurzadyan, son marcas dejadas en nuestro eón por las ondulaciones esféricas de las ondas gravitatorias que se generaron cuando los agujeros negros colisionaron en el eón anterior.
Y estos círculos, sostienen, suponen un serio problema para la teoría inflacionaria, según la cual la distribución de las variaciones de temperatura en el cielo deberían ser Gaussianas, o aleatorias, en lugar de tener estructuras discernibles en su interior.
Si Penrose tiene razón, cambiará por completo la forma que tenemos de percibir el universo en que vivimos, su nacimiento y su destino final.

jueves, 13 de febrero de 2014

Explorador chino

El robot explorador chino se pierde en la Luna


© AFP
El robot que China envió a la Luna dentro de su ambicioso programa espacial ha sido declarado oficialmente perdido tras no haberse podido restablecer el contacto con el aparato.
 
Se cree que el 'rover' Yutu (conocido como 'Jade Rabbit' en inglés o 'Conejo de Jade' en español) se desactivó debido a una combinación de problemas técnicos que fueron detectados con anterioridad. Hace días se informó del hallazgo de varios fallos en el 'rover', pero los operadores chinos confiaban en poderlos solucionar. Posteriormente se perdió el contacto y las opciones de restablecer el contacto con el aparato son casi nulas.

Yutu —un dispositivo autopropulsado de 100 kilos de peso— abandonó la sonda que lo transportaba a mediados de diciembre del año pasado para recorrer la superficie lunar durante los próximos tres meses.

El explorador chino podía desplazarse a 200 metros por hora y disponía de varias cámaras y brazos móviles para extraer muestras del suelo lunar. Los especialistas chinos preveían que Yutu lograría por primera vez en la historia instalar un telescopio en el satélite natural de la Tierra. Además, Yutu debía estudiar el gas ionizado que circunda nuestro planeta y analizar por medio de un radar la superficie de la Luna.

El 'rover' lunar chino se convirtió en la primera máquina que alunizaba en los últimos 37 años. A pesar de su corto periodo de actividad en la superficie de nuestro satélite, el aparato llegó a enviar a la Tierra más de 4.600 imágenes.

miércoles, 12 de febrero de 2014

Los neutrinos

Neutrinos masivos resuelven contradicciones del modelo cosmológico estándar

Científicos británicos miden por primera vez con precisión estas escurridizas partículas, y descubren que tienen una masa cinco veces mayor de lo previsto



Científicos británicos han resuelto contradicciones importantes del actual modelo estándar de la cosmología, al incluir en él neutrinos con una masa cinco veces mayor de lo pensado hasta ahora. Utilizando observaciones del Big Bang y de la curvatura del espacio-tiempo, han medido con precisión por primera vez la masa de estas escurridizas partículas elementales.

 Las anisotropías de la radiación cósmica de fondo, observadas por Planck. Fuente: ESA/Planck Collaboration/D. Ducros.   Un grupo de científicos ha resuelto contradicciones importantes del actual modelo estándar de la cosmología, al incluir en él neutrinos masivos.

El equipo, de las universidades de Manchester y Nottingham (Reino Unido), ha utilizado observaciones del Big Bang y de la curvatura del espacio-tiempo para medir con precisión la masa de estas escurridizas partículas elementales por primera vez, obteniendo resultados cinco veces mayores de lo estimado hasta ahora.      


La luz más antigua y su contradicción

Los últimos datos sobre la radiación de Microondas Cósmica de Fondo (CMB) -el resplandor dejado por el Big Bang- obtenidos por la nave espacial Planck señalaban una discrepancia con las predicciones de observaciones anteriores.

El CMB es la luz más antigua del Universo, y su estudio ha permitido a los científicos medir con precisión parámetros cosmológicos, como la cantidad de materia en el Universo y su edad. Pero aparece una contradicción cuando se observan las estructuras a gran escala del Universo, tales como la distribución de las galaxias .

El profesor Richard Battye , de la Escuela de Física y Astronomía de la Universidad de Manchester, explica en la nota de prensa de la institución: "Se observa un menor número de cúmulos de galaxias de lo que se puede esperar de los resultados de Planck y hay una señal más débil procedente de las lentes gravitacionales de galaxias de lo que indicaría el CMB".

Una lente gravitacional, o gravitatoria, se forma cuando la luz procedente de objetos distantes y brillantes como cuásares se curva alrededor de un objeto masivo (como una galaxia) situado entre el objeto emisor y el receptor.      
Una explicación posible

"Una posible manera de resolver esta discrepancia es que los neutrinos tengan masa. El efecto de estos neutrinos masivos sería contener el crecimiento de estructuras densas que conducen a la formación de cúmulos de galaxias", explica Battye.

Los neutrinos interactúan muy débilmente con la materia y por lo tanto son muy difíciles de estudiar. Originalmente se pensó que no tenían masa, pero los experimentos de física de partículas han demostrado que sí la tienen y que hay varios tipos o sabores. La suma de las masas de estos diferentes tipos se había estimado en algo más de 0,06 eV, mucho menos de una milmillonésima parte de la masa de un protón.
Solución en forma de neutrinos masivos

En este trabajo, el profesor Battye y el co-autor Adam Moss, de la Universidad de Nottingham, han combinado los datos de Planck con las observaciones de lentes gravitacionales, en las que las imágenes de las galaxias se deforman por la curvatura del espacio-tiempo.

Los científicos llegan a la conclusión de que las discrepancias pueden resolverse si se incluyen neutrinos masivos en el modelo cosmológico estándar; estiman que la suma de las masas de los neutrinos es 0.320 eV, con un margen de error de 0.081 eV. Es decir, cinco veces más de lo estimado hasta ahora.

Moss añade: "Si este resultado se confirma con un análisis más profundo, no sólo es una aportación significativa a nuestra comprensión del mundo sub-atómico, sino que también sería una extensión importante para el modelo estándar de la cosmología que se ha desarrollado durante la última década".